recomendaría el lugar sin duda alguna para relajarse durante un par de noches

Cómodo dormitorio, excelente recepción, el desayuno es muy variado, la ubicación es ideal y se encuentra a solo 15 minutos a pie de la estación central de trenes, además el bar/lounge tiene un ambiente agradable para descansar después de un día de exploración.

Nada que decir

Esperaba un trato de reyes, pero me encontré con una habitación sin mesa ni cafetera. La almohada, casi inexistente, me dejó con dolor de cuello. Adicionalmente, esperaba un regalo de bienvenida por mis inconvenientes, pero solo recibí indiferencia. Casi decidí escribir una buena crítica, pero es que no pude contener mi indignación.

Habitación amplia y cómoda para la familia.

excelente acceso a museos y parques para paseos agradables

Disfruté mucho de mi estancia, ya que está a solo 15 minutos a pie del Museo Munch y el hermoso Jardín Botánico de la Universidad, perfecto para mis excursiones caminando por la ciudad. además, la parada del tranvía está a menos de 100 metros, lo que facilitó mi transporte por Oslo.

El hotel tiene una buena variedad de desayuno.

Me sentí bastante incómoda en la habitación compartida. La limpieza dejaba mucho que desear y los baños olían muy mal. Era especialmente frustrante que intentaran abrir la puerta del baño mientras me duchaba, lo que hizo que no pudiera relajarme ni un momento.

limpieza impecable y excelentes vistas desde la habitación

vistas espectaculares, limpieza excepcional

falta de aire acondicionado

Pasamos un gran tiempo en este hotel. La ubicación es perfecta, a solo 20 minutos del Palacio Real y Aker Brygge, y 15 minutos de la Ópera. El desayuno es excelente, con opciones variadas. El personal es muy amable, lo que hizo nuestra estancia aún mejor. Definitivamente lo recomendaría.

Una cosa que no me gustó fue que el WiFi gratuito tenía una cobertura y velocidad bastante pobre, lo que complicó un poco algunos planes.

Fue una selección óptima para una estancia concisa en Oslo con muy buena relación calidad precio. La habitación era austera, pero todo estaba limpio y bien cuidado, lo que la hacía bastante cómoda. Si necesitas algo básico y bien ubicado, es una buena opción para dormir.

Ubicación excelente, cerca del tranvía y baño con suelo radiante. Habitación espaciosa, perfecta para relajarte, aunque no para guardar ropa. me sentí como en un juego de Tetris.

El armario era más como un adorno decorativo que un almacenamiento real, ¡casi me da pena verlo!

Las instalaciones son bastante limpias y cómodas, perfectas para descansar tras un día explorando la ciudad. La ubicación es genial, a solo 10 minutos a pie del centro y cerca de una parada de tranvía. ¡Definitivamente lo recomendaría!

me sentí como en familia, no tengo ninguna queja

El hotel tiene una ubicación excelente, con el tranvía justo a la puerta, lo que facilita moverse. Las habitaciones están reformadas y son cómodas, aunque en mi caso, la cama parecía un poco pequeña. El desayuno es variado y cuenta con opciones para alérgicos, pero la afluencia de gente hace que sea difícil encontrar lugar. La experiencia se vio empañada por una multa inesperada en el parking y un servicio al cliente poco amable.

El desayuno fue una delicia con opciones frescas y deliciosas, como croissants recién horneados y una variedad de jugos orgánicos, lo que me ayudó a comenzar bien el día antes de explorar la hermosa Oslo.

Mejorar la iluminación en la habitación sería ideal.

El desayuno era impresionante, con una gran selección de opciones frías y calientes, y el personal siempre estaba dispuesto a ayudar. Además, la ubicación es muy conveniente, ya que está justo en el centro de la ciudad y cerca de una parada de tranvía.

La limpieza de la habitación podría mejorarse, ya que noté que en algunas áreas no estaba tan impecable como se esperaría.

La ubicación es bastante buena, ya que está a un corto paseo del centro y hay un tranvía justo afuera, lo que facilita moverse. El desayuno es variado y hay opciones suficientes para empezar bien el día. La habitación estaba limpia y, aunque la cama era muy blanda para mi gusto, era cómoda. La experiencia en general fue positiva, ideal para quien busca un lugar básico y funcional para descansar después de un día de exploración en la ciudad.